Articulo De Finanzas Empresariales:
Aporte de capital, haciendo crecer tu empresa
¿Crees
que ya es hora de que tu empresa crezca? Para que esto ocurra, probablemente
necesites de una inversión significativa, ya sea para la ampliación de tu
estructura o el desarrollo de un nuevo producto. Sin este dinero en caja, la
salida es buscar un aporte de capital
Principales tipos de aporte de
capital
Son varios los tipos de aporte de capital con
los que una empresa puede contar. Para saber cuál es el que mejor se adecúa a
tus pretensiones, debes tener en cuenta dos variables: la primera es el destino
que tendrá el dinero. La segunda, tan importante como la primera, es la etapa en que se encuentra la empresa.
Básicamente, existen cuatro tipos de aporte de capital, que se
utilizan en diferentes etapas. En la etapa inicial de la empresa, podemos encontrar al inversor-ángel, que es aquella persona, que puede ser un familiar o un conocido; que
cuenta con el efectivo y la experiencia y se arriesga en invertir su dinero en
tu proyecto; aportando además en algunas ocasiones con su empuje y
conocimiento, es decir se involucra en el proyecto a fin de que se realice exitosamente
y a cambio de un porcentaje del mismo o la devolución de su inversión con su respectiva
ganancia. En esta etapa podemos encontrar también el capital semilla,
que puede ser aportado de igual manera, por conocidos, familiares o
instituciones. Que generalmente buscan a cambio un porcentaje del proyecto, por lo cual no implica la devolución del monto financiado.
Ambos tipos de aporte
son de son de alto riesgo debido a la
incertidumbre de éxito y generalmente no son grandes cantidades y solventan el
funcionamiento de la empresa hasta que esta pueda generar caja. En esta etapa
las entidades que prestan capital semilla lo hacen a proyectos que tengan un
potencial de crecimiento
En la fase de maduración, la mejor
alternativa es el venture capital, o
capital de riesgo, que implica buscar, inversionistas que puedan inyectar
dinero, a cambio de cederles un porcentaje de las acciones de la empresa y en
el control de la misma.Generalmente las empresas que recurren a este tipo de inversión,
son aquellas a las que no les ha ido muy bien los dos o tres primeros años, no
han conseguido inversiones y recurren a esta opción a fin de poder mejorar su situación
y actividad.
Ya en la fase de desarrollo, la mejor
alternativa es el Private
Equity, con riesgo menor, pero con expectativa de retorno mucho más
alta. Generalmente este tipo de inversión se da con empresas estables, con
buenos flujos de caja; en las cuales algunos accionistas desean vender por
alguna circunstancia sus acciones, tomándose con ello la mayor parte del
accionariado y a futuro con la perspectiva de venta de las mismas; Este tipo de
inversión lo hacen empresas especializadas en el manejo de riesgo de capital.
Sin embargo, ¿cómo
usar este aporte de capital? Es necesario que cuentes con un plan de negocios que planifique el
destino del dinero. Sin esta herramienta, existe la posibilidad de que se
desvíe el foco y se utilice el dinero para otro fin que no sea el planeado, lo
que genera rombos en las finanzas y descontento entre los inversores.
Relación con el inversor después del
aporte
Muchos emprendedores aseguran que la mejor
estrategia después de conseguir una inversión es mantener una cierta distancia del inversor. De esta manera,
él se preocupará sólo por la participación en los lucros, mientras el
emprendedor gerenciará el negocio y ganará suficiente autonomía para
tomar las decisiones de la manera que prefiera.
No obstante, esta estrategia puede aparecer
como un error en algunos casos. Si después de obtener el aporte de capital
construyen una sociedad basada
en la confianza, ambas partes involucradas en el negocio se verán beneficiadas.
Confianza es, entonces,
el primer paso. Construye una relación basada en este principio, siempre
pensando a largo plazo. Nunca sabes cuánto tiempo durará la relación
inversor-emprendedor, pero generalmente se prolonga durante un período extenso
de tiempo. Y cuanto más extenso, más son las posibilidades de que tu negocio
prospere con la sociedad. Las actitudes simples en muchas ocasiones hacen la
diferencia en estos momentos, como compartir problemas o escuchar consejos y
sugerencias sobre cómo actuar.
Después, puedes crear un pequeño concejo, un grupo de personas
que contemple divisiones de tareas y responsabilidades. Así, puede haber un
responsable de finanzas, otro de RRHH, y otro de estrategias de mercado, por
ejemplo. El inversor puede participar de estas reuniones y mantenerse interiorizado
de las decisiones.
También puede prepararse un material impreso
–no más de 30 páginas-, con un análisis de prioridades e información financiera
detallada de determinado período. Por último, otro consejo importante: conoce a los inversores que trabajan
contigo. Conoce sus puntos fuertes y débiles. Basándote en esta información,
sabrás exactamente en qué áreas y cómo cada uno de ellos puede contribuir a que
el emprendimiento crezca cada vez.
En nuestro país existen diferentes programas por parte del estado como: innovate Peru, Starup Peru, así como iniciativas privadas como: para quitarse el sombrero, iniciativa del grupo romero y Wayra que es iniciativa del grupo telefónica. Entre otras mas que no solo fomentan el crecimiento y desarrollo de empresas, si no que invierten y otorgan fondos para que estas puedan seguir desarrollándose.
En nuestro país existen diferentes programas por parte del estado como: innovate Peru, Starup Peru, así como iniciativas privadas como: para quitarse el sombrero, iniciativa del grupo romero y Wayra que es iniciativa del grupo telefónica. Entre otras mas que no solo fomentan el crecimiento y desarrollo de empresas, si no que invierten y otorgan fondos para que estas puedan seguir desarrollándose.